Un triste como dañino combo afecta desde siempre a la humanidad, pero por acciones u omisiones se agiganta en estos tiempos. Un combo fatal que golpeará a todos más tarde o más temprano: el de las mentes bloqueadas y corazones enfriados.
Mentes bloqueadas por el rencor, el odio, el fanatismo, la ausencia de dimensión del concepto de prójimo y el desconocimiento de cómo el «yo» depende de un «otro» para alcanzar la plenitud y el bienestar.
Corazones enfriados por la indiferencia, la ausencia de empatía, el cultivo del interés personal o sectorial a cualquier costo, el individualismo, etcétera.
No advierten muchos que han sido puestos como una pobre rana en una olla con agua fría sobre fuego. Cuando el agua se caliente será tarde para salir de allí.
Todo en el universo Dios lo ha interconectado. Nadie se salva solo, aunque a veces lo parezca. El pago puede ser en diversas especies.