Por Marisa Plano
Pensar creativamente es la capacidad para idear algo nuevo, poner en relación aspectos que hasta el momento no estaban presentes y con ello descubrir, por ejemplo una nueva manera de resolver un problema, enfrentar una situación y hasta pensar estrategias diferentes a la hora de planificar una tarea educativa o de la vida diaria.
La vida creativa no es solo para artistas, se trata de involucrarse tomando decisiones y acciones diarias que moldean un accionar único y diferente a los demás. Se trata de estar abierto a oportunidades diversas para resolver problemas.
La creatividad es la inteligencia de una manera más divertida, debemos saber que todo niño es un artista, Lo importante es seguir siendo un artista cuando creces; por eso es bueno que tanto el docente como la familia del niño le inculque no tener miedo a la perfección porque en realidad nunca se alcanza.
Tengamos presente que la creatividad es una habilidad humana crucial del siglo XXI que nos permite generar ideas novedosas y valiosas. Las ideas creativas son originales y aportas, una contribución única a cualquier campo que trabajemos, además de ayudar a resolver problemáticas complejas que la humanidad enfrenta constantemente.
Paulo freire sostiene que » No habría creatividad sin la curiosidad que nos mueve y que nos pone pacientemente impacientes ante el mundo que no hicimos, al que acrecentamos con algo que hacemos» .
Por todo lo expuesto es importante que en cada clase vivida exista la impronta del niño aportando su emoción y entusiasmo con el modo de buscar una alternativa diferente a un resultado brindado frente a una situación problemática planteada en el aula.
Me despido de ustedes con una frase de Albert Einstein que nos lleve a la reflexión : » LA CREATIVIDAD ES LA INTELIGENCIA DIVIRTIÉNDOSE».
Marisa Plano
Lic.en Ciencias de la Educación
Fuente foto: indianlink