“Hay negocios que sólo funcionan con sus dueñas. Y eso no está mal… pero tampoco es libertad.” Así comienza la reflexión de Albina Gabriela Silva, mentora de marca personal y creadora del programa «Acelera tu Éxito». En esta nota nos comparte su mirada sobre los distintos niveles de consciencia empresarial, y cómo podemos pasar de ser autoempleadas a ser verdaderas creadoras de negocios con alma.
*Albina, dijiste que hay negocios que sólo funcionan con sus dueñas. ¿Qué querés decir con eso?
*Muchas veces veo mujeres que tienen ideas brillantes, propuestas valiosas, pero que han montado un sistema que sólo funciona si ellas están presentes todo el tiempo. Eso no está mal si lo eligen desde el gozo. El tema es cuando se convierte en una cárcel: si vos no estás, no se vende, no se mueve, no crece. Y ahí perdemos libertad, que es una de las razones por las que muchas iniciamos.
¿Entonces ser autoempleada no es ser dueña de negocio?
*No exactamente. Ser autoempleada es intercambiar tiempo por dinero. Es tener un oficio que amás, pero sin estructura que funcione sola. En cambio, ser dueña es crear un sistema con activos, equipo y visión. Pero hay algo más profundo aún: ser canal de una visión más grande. Ser alma emprendedora. Es ahí donde el negocio cobra vida propia.
¿Cómo sería un negocio que vibra con tu alma?
*Es un negocio que tiene propósito, que está alineado con tu ser. No depende de vos, pero vos elegís estar porque te apasiona. Podés irte seis meses de viaje, y todo sigue funcionando. No porque te reemplazaste, sino porque diseñaste con visión y coherencia. Lo construiste para servir, para expandirse más allá de tu presencia física.
¿Qué necesitamos para dar ese salto del autoempleo a la verdadera libertad empresarial?
*Conciencia. Reconocer desde dónde estamos creando: ¿desde la obligación o desde la elección? También estrategia: sistema, procesos, equipo, delegar. Y sobre todo, visión. Preguntarte cada día: ¿esto me da libertad o me atrapa? ¿Estoy siendo el alma del negocio o su engranaje? Cambiar la pregunta cambia la estructura.
¿Un mensaje final para quienes están construyendo sus negocios?
*Sí: que se animen a gritar #AcáVoooooy con toda el alma. Que no se conformen con modelos prestados. Que creen un negocio que les dé alegría, expansión y libertad. Que puedan elegir estar… o no. Y que su negocio siga brillando igual.
¿Querés compartir tu grito emprendedor?
Escribime y contame desde dónde estás creando tu negocio.
Información: @emprendeconalbina