La cineasta Sofia Coppola dijo que aún tiene que luchar por «una pequeña fracción» del enorme presupuesto que obtienen los directores masculinos y atribuyó esa desigualdad a «un remanente de la cultura del negocio» del cine.
La directora de «Priscilla», que narra la vida de Priscilla Presley, donde contó con un presupuesto de 20 millones de dólares, declaró a la BBC: «Sólo veo a todos estos hombres recibiendo cientos de millones de dólares, mientras yo lucho por una pequeña fracción de eso».
«Es frustrante, pero siempre estoy luchando por conseguirlo. Estoy feliz de poder hacer mis películas de forma independiente y encontrar gente que crea en ellas”, señaló la directora de filmes como «Las vírgenes suicidas» y «Perdidos en Tokio».
A pesar de esa frustración, la hija de Francis Ford Coppola destacó que la ventaja de mantenerse independiente es que no tiene que lidiar con los comentarios de sus superiores: «Existe un desafío y una libertad al hacer cosas pequeñas porque si tienes un presupuesto grande, cuentas con muchas aportaciones de los ejecutivos del estudio, y yo nunca podría hacer una película como esa», continuó.
Y agregó: «Entonces tengo esa libertad, y luego tienes que ser muy astuto, y fue muy difícil, pero tenía el mejor equipo», según consignó el portal estadounidense The Hollywood Reporter.