Una insulina de acción rápida para el control de la glucemia luego de las comidas se aprobó en la Argentina y la nueva formulación de insulina aspártica demostró llegar antes a la sangre y actuar más tempranamente que las demás insulinas prandiales actuales, lo que contribuye al control de la glucosa en sangre luego de la ingesta de alimentos, conocida como glucemia post prandial.
León Litwak, médico endocrinólogo especializado en diabetes y ex presidente de la Sociedad Argentina de Diabetes (SAD) señaló: «Este año se cumple un siglo del desarrollo de la primera insulina, un paso trascendental que permitió con el tiempo cronificar una enfermedad que hasta ese entonces era inevitablemente mortal».
«Logrando un buen control, hoy se puede vivir con diabetes y tener la misma expectativa de vida que la de una persona sin diabetes. De todos modos, sigue siendo valioso que lleguen más y mejores alternativas que optimicen el tratamiento. En ese marco, esta nueva insulina más rápida es un aporte significativo para contar con más flexibilidad a la hora de la aplicación de insulina prandial y para un mejor control de la glucemia post prandial», sostuvo.
La nueva insulina aspártica rápida presenta un perfil farmacológico que se aproxima a la respuesta fisiológica de la insulina natural, que produce el organismo de una persona sin diabetes tras la ingesta de una comida, lo que la posiciona como una herramienta que puede ayudar a mejorar los niveles de glucosa post prandial y el control glucémico general, en personas a partir del año de vida, tanto con diabetes tipo 1 como tipo 2 o diabetes durante el embarazo.
«Pasamos más del 60% del tiempo en modo de glucemia post prandial, por lo cual tener bajo control los niveles de azúcar en sangre tras la ingesta de alimentos es clave para contribuir a prevenir o demorar el desarrollo de las complicaciones asociadas a la diabetes», expresó Litwak.
Por su lado, el doctor Adrián Proietti, médico endocrinólogo, indicó: «Por su rápida acción, mejora el control de la glucemia post ingesta, teniendo un impacto directo en ese período, que – por sus características particulares- es el que mayor desafío representa en el tratamiento de nuestros pacientes».
«Esta nueva herramienta propone una franca repercusión en la reducción de la elevación de la glucosa en sangre (hiperglucemia) en dicho período sumado a no incrementar riesgo de descenso en la glucemia (hipoglucemia), ofreciendo entonces un beneficio dual: eficacia en el control de la hiperglucemia y seguridad en el riesgo de desarrollar hipoglucemia», afirmó.
El abordaje de la diabetes en personas que requieren la administración de insulina, que son la totalidad de los casos de diabetes 1 y una porción de los que presentan diabetes tipo 2, incluye la administración de una insulina basal o lenta, generalmente una vez al día, más la indicación de insulina rápida al momento de las comidas, para evitar que quede circulando una cantidad significativa de azúcar en la sangre por un tiempo prolongado.
La nueva formulación de insulina aspártica es una versión mejorada de su antecesora porque incorpora 2 nuevos excipientes: la vitamina B3 (nicotinamida), que incrementa la velocidad de absorción y hace que la insulina sea más rápida, lo que facilita el efecto hipoglucemiante más temprano, y el aminoácido L- arginina, que estabiliza la formulación.
Como beneficios de la utilización de la nueva insulina para las personas con diabetes, se destacan una mayor flexibilidad en el horario de administración, mejor control de la glucemia post prandial, menor riesgo de hipoglucemias tardías o nocturnas y la facilidad de un dispositivo amigable de aplicación, que consiste en una lapicera prellenada.
La eficacia y el perfil de seguridad de la nueva insulina fue demostrada en el Programa de estudios clínicos en fase IIIa denominado ‘Onset’ sobre más de 2.100 personas con diabetes tipo 1 o 2, a los que luego se les incorporó una segunda tanda de cuatro estudios en fase IIIb.
Estas investigaciones mostraron que la nueva insulina aspártica rápida obtuvo un mejor control glucémico que la insulina rápida de referencia, tanto en diabetes 1 como en 2, con una reducción consistente en el nivel de glucosa en sangre después de las comidas, sin diferencias significativas en la tasa de hipoglucemias graves o confirmadas.
«Los resultados de los estudios que conforman el Programa Onset demuestran que estamos frente a una nueva alternativa muy eficaz en el control de la glucemia post prandial, segmento en el que ha habido muy pocos avances en los últimos años», subrayó Litwak, quien también es miembro del Servicio de Endocrinología, Metabolismo y Medicina Nuclear del Hospital Italiano de Buenos Aires.
«La nueva insulina evidenció un paso más en la búsqueda de un mayor acercamiento a la insulinización con patrón fisiológico natural y representa una contribución innovadora a una necesidad no del todo resuelta en el tratamiento de esta enfermedad», destacó el Dr. Proietti.
Desafíos que enfrentan las personas con diabetes
- Complejidad: La diabetes es una enfermedad compleja y el tratamiento con insulina implica la toma de una gran cantidad de decisiones todos los días).
- Estigma: Por otro lado, las personas con diabetes que reciben tratamiento inyectable manifiestan que muchas veces deben convivir con el estigma de ser confundidos con individuos que consumen sustancias prohibidas por vía intravenosa.
- Complicaciones: 1 de cada 2 personas con diabetes tipo 2 ya cuenta con alguna complicación al momento de su diagnóstico.
- Riesgo de ECV: las personas con diabetes tipo 2 tienen un riesgo de desarrollar enfermedad cardiovascular (ECV) de 2 a 4 veces mayor que una persona sin diabetes.
- Hipoglucemias: el 83% de las personas con diabetes tipo 1 experimenta al menos 1 episodio de hipoglucemia al mes.