Leonor que ya era madre de María Antonieta y de Nicolás, hijos de su primer matrimonio, ya divorciada adoptó a Marcos que tenía dos años: «Para mí fue un proceso supra normal. Porque precisamente a raíz del éxito que me tomó por asalto Rosa de Lejos, empecé a trabajar de voluntaria en Casa Cuna. Y estuve allí donde apareció Marcos. El me eligió a mí. Fue una escena de edulcorada de película americana. Me paré en la puerta de una sala muy grande donde estaban los chicos y apareció un nenito rubio, dos años tenía, y empezó a caminar por el pasillo como si un director de cine le estuviera diciendo qué hacer, y terminó corriendo hasta mis rodillas. Y ahí empezó un amor… Cada vez que me iba, le agarraba un ataque como los niños que aparecen en El Exorcista y un día me dijo «Llevame con vos».
Amor maternal