La séptima temporada de «La peña de Morfi», el exitoso ciclo creado de Gerardo Rozín en Telefe, comenzará el domino 20 de marzo próximo con Iván de Pineda en la conducción, junto a Jésica Cirio.
El estreno de la nueva temporada estaba previsto para el domingo último, pero dado el delicado estado de salud que atravesaba Gerardo Rozín, su creador, Telefe había decidido aplazarlo por tiempo indeterminado.
Sin embargo, tras la muerte del conductor y creador del ciclo, el canal y la productora acordaron una nueva fecha de estreno.
El programa de música, cocina, entrevistas y humor volverá a la pantalla chica el próximo 20 de marzo a la 11:00, su horario habitual, con Jésica Cirio e Iván de Pineda, quien ya había reemplazado a Rozín en varias emisiones.
Según trascendió, el primer programa de la nueva temporada estará dedicado por completo a Rozín con distintos homenajes.
La última aparición pública del rosarino en su programa fue a fines de diciembre y en el brindis por fin de año reflexionó por sus más de tres décadas en los medios.
«Soy un tipo que no tuve nunca un fin de semana. Nunca. Comencé a trabajar a los 15 años en un diario y en los diarios se usaba tener franco viernes y sábados o domingos y lunes. Desde entonces, y no hay queja, porque me ha ido bien en la vida. Vivo de lo que me gusta. Cero queja es cero queja, es solo un comentario. Mis hijos nunca me vieron un fin de semana completo. Porque cuando no fue una cosa, fue otra. Yo hace más de 30 años que trabajo y nunca tuve un fin de semana, salvo las semanas de vacaciones. Hoy entendía que yo trabajo para una gente que disfruta de una manera distinta. Yo disfruto tratando de que disfruten», manifestó el padre de Pedro, fruto de su matrimonio con Mariana Basualdo, y Elena, de su relación con Carmela Bárbaro.
Consciente de que el diagnóstico que recibió en marzo de 2021, cuando le descubrieron un tumor cerebral, era irreversible, en otra emisión del programa dominical, el rosarino eligió una significativa canción para cantar en vivo: «Me voy quedando», de Gustavo Leguizamón, un tema que interpretó a capella junto al trío Dos más uno.
«Me voy quedando ciego, la luz titila en mis huesos, sólo la noche derrama su esperanza en el silencio. Dorado, herido, por lunas que pasan cantando. Me voy quedando huraño, embalsamando destinos. No me arrepiento de nada, el bien y el mal son olvidos, estuches del aire que guardan la pena y el grito», fueron algunos versos que entonó el periodista, conductor y productor, que sin dar detalles de su estado, encontró una manera poética de decirle «adiós» a su público. .