La futbolista marplatense Milagro Menéndez, integrante del seleccionado nacional y del club Granada, de España, bregó por que «cada futbolista en la Argentina pueda vivir» de esa actividad, y alertó que las mujeres tienen que «luchar por todo, tirar barreras todo el tiempo», aunque destacó que eso en su deporte «está cambiando».
En diálogo con el ciclo «Periodismo en Vivo», del periodista Vito Amalfitano en Instagram, Menéndez dijo desde España que «toda jugadora de fútbol sueña con vivir de eso».
«Las mujeres tenemos que luchar por todo, tirar barreras todo el tiempo, pero el fútbol está cambiando. Yo siempre voy a dar la lucha para seguir mejorando. Ahora estamos todas juntas, apoyando a todo el deporte argentino», resumió la delantera del seleccionado argentino.
En ese sentido Menéndez, transferida a Granada desde Racing, resaltó a la jugadora Macarena Sánchez. «Con Maca Sánchez me saco el sombrero. Fue la primera jugadora profesional, es admirable su lucha. Hay muchas mujeres que luchan y ganan», reflejó.
La marplatense, de 23 años, subrayó también una frase de Mara López, la primera futbolista trans: «‘En la vida los sueños están para trabajar y cumplirlos’. Ella luchó mucho, el deporte no tiene que tener género».
Tras reflejar su admiración por «Lionel Messi, Lautaro Martínez, Luis Suárez y Carla Eloy, delantera de Estados Unidos», Menéndez relató que en España contrajo coronavirus y alertó: «En Granada hay muchísimos casos, desde las 10 de la noche hasta las 7 de la mañana hay toque de queda. En Argentina se viene el verano, pero hay que seguir cuidándose y seguir los protocolos».
«Por suerte a mí me agarró leve, muy pocos síntomas, pero hay que cuidarse, no hay que pensar que es sólo un virus y ya, ha matado mucha gente», aconsejó.
Menéndez contó desde hace un mes no juegan por la Covid-19, «muchos equipos estuvieron aislados», y sostuvo que «acá hay un rebrote bastante fuerte y por eso suspendieron fechas».
La marplatense refirió que «llegar a la Selección es el premio a todo el trabajo del día a día con tu club, es un orgullo vestir los colores del país» y recordó sus inicios: «Se me dio la oportunidad de ir a Buenos Aires con 17 años, ahí dejé el último año del colegio, a mis compañeros, dejé muchas cosas. Lamentablemente en el fútbol y en el deporte perdés más de lo que ganas».
Y se queda con un sueño: «Dejo que la vida me sorprenda pero creo que sueños se trabajan, un día no te levantás y decís ‘quiero ganar un mundial’, trabajás para que eso pase. El sueño de toda jugadora es que Argentina sea campeón mundial, vamos a luchar por eso y trabajar para lograrlo», concluyó.