¿Por qué es necesario hablar de reciclaje textil o de telas recicladas? Estamos atravesando un momento donde es necesario frenar y repensar la forma en que se produce y se consume la moda. Una manera de hacerlo es considerando de manera seria el reciclaje, ya sea de prendas, tejidos, como una solución posible para reducir las toneladasdesechos textiles que la industria de la moda genera.

El mayor problema de la industria de la moda proviene de la ‘basura textil’. Año con año, millones de toneladas de desechos textiles son vertidas en basurales, producto del descarte de prendas y residuos de la producción que provienen de la industria del fast-fashion. La mayoría de estas telas desechadas no son ni orgánicas, ni naturales, por lo que tardan miles de años en descomponerse para volver a la tierra, y cuando lo hacen, es liberando miles de partículas de microplástico, contaminando el planeta entero. Es por esto que el mundo está inclinando hacia el movimiento zero waste, o residuo cero, y las el reciclaje textil cumple un rol muy importante cuando se busca minimizar y optimizar la gestión de residuos en el mundo.

Una manera de contribuir a reducir el impacto de la ‘basura textil’ en el planeta es comprando prendas que realicen a partir del reciclaje textil. Si bien la mejor alternativa siempre será la de elegir tejidos sustentables, orgánicos y biodegradables, de la misma forma que el supra-reciclaje en la moda, el reciclaje textil es de gran importancia a la hora de desacelerar la producción de nuevos textiles sintéticos, a base de petróleo.

© Alexander Neumann. La diseñadora peruana luce chaqueta de nylon de Balkanica; top de Mango; pantalón a cuadros, de Mozh Mozh; cinturón y gafas vintage.

¿Qué textiles pueden ser reciclados y cuáles son sus beneficios?
Poliéster reciclado

Las fibras de poliéster reciclado, también llamado rPet, se hace a partir del reciclado de botellas plásticas. Si bien los tejidos hechos a partir de esta fibra no son naturales ni biodegradables, generan un 54% menos de emisiones de CO2 a la atmósfera e insume un 70% menos de energía en su realización, en comparación con el poliéster crudo. En Latinoamérica, la marca Argentina vegana Nous Etudions utiliza tejidos de poliéster reciclado para realizar sus colecciones.

© Alexander Neumann. La diseñadora peruana luce chaqueta de nylon de Balkanica; top de Mango; pantalón a cuadros, de Mozh Mozh; cinturón y gafas vintage.
Algodón reciclado

El mayor beneficio que tiene el reciclaje del algodón es la optimización de recursos energéticos y naturales que se necesitan para realizarlo. Sabemos que el algodón es la fibra natural por excelencia, pero para generarla se utilizan toneladas de agua, pesticidas químicos para cuidar los cultivos (cuando no es orgánico), por eso la producción masiva de algodón está siendo cuestionada.

© Getty Images Algodón orgánico crudo.El algodón reciclado aún no es muy accesible, aunque existen fábricas, como la guatemalteca, The New Denim Project, que proveen a la industria de la moda con tejidos realizados a partir de esta fibra.

Nylon reciclado

El nylon reciclado tiene los mismos beneficios y desventajas que el poliéster reciclado. Si bien no es una fibra natural, que lleva muchos años en descomponerse, es mejor utilizar esta variante a que el nylon virgen. La mayor parte de esta fibra se realiza a partir del reciclaje de las redes de pesca que son desechadas en el océano, también es posible reciclar alfombras y medias de nylon. Si bien el nylon reciclado es menos accesible que su versión virgen, tiene muchos beneficios sobre el medioambiente.

Actualmente el más conocido es el Econyl, es utilizado por múltiples marcas, como la Argentina Isla de Lobos, o Juan de Dios de Colombia, para realizar trajes de baño sostenibles.

Lana reciclada

El uso de lana reciclada es una gran alternativa porque, además de evitar que sea desechada en vertederos, evita el gasto de toneladas de agua y productos químicos utilizados en los procesos de fabricación. Existen distintos certificados para identificar aquella lana que ha sido reciclada, como el Recycled Claim Standard (RCS) o el Global Recycled Standard (GRS).

Fuente de la información: Vogue