Mantener un peso adecuado no es una cuestión de estética, es sobretodo un asunto de buena salud. Los médicos y nutricionistas alertan sobre alimentos que, «consumidos en exceso» favorecen el sobrepeso y afectan a todo el organismo. He aquí algunos:
Papas fritas: muy ricas, pero no solo engordan, sino que elevan el colesterol.
Bedidas gaseosas dulces: engordan y son amigas de la suba de glucosa.
Las conocidas como comidas rápidas (hamburguesas, pollos fritos, etcétera): una bomba de grasas saturadas que afectan las arterias, el corazón y engordan.
Pastelería, especialmente la industrial: facturas, alfajores, tortas, un manjar, pero también a la gordura se le hace agua la boca.
Alcohol: aporta calorías y ningun nutriente e invita a ingerir carbohidratos
Helados: refrescantes y ricos, pero aliados de la obesidad
Aderezos de comidas, especialmente industriales, como mayonesa, salsa golf, etcétera.
Pastas, especialmente las compradas y hechas con harina refinada. Se recomiendan las de harina integral y de ser posible hechas en casa.
Chocolate blanco, el peor de los chocolates, porque al contrario del negro que (con cacao al 80%) puede ser beneficioso, tiene mucha mezcla.
Pan blanco: engorda e inflama, lo mismo que galletas industriales hechas con harina de trigo refinada.
Otro alimento que contienen muchas calorías son los frutos secos. Son beneficiosos para la salud, claro, pero deben consumirse moderadamente.
Por último: esto no implica que no haya permitidos, pero deben ser la excepción y no la regla. Las comidas hechas en casa, como las hacía la abuela, son las mejores.