El astigmatismo es un problema visual que afecta a gran parte de la población, tanto a niños como a adultos. Por ello, conocer en qué consiste, así como las causas y síntomas que lo identifican, puede ayudarnos a reconocerlo y encontrar una solución.
El reconocido médico José Ángel Cristóbal Bescós, de la Sociedad Española de Oftalmología, explica en qué consiste este problema tan común.
El astigmatismo es un error refractivo capaz de producir una disminución de la visión tanto lejana como cercana.
Según el oftalmólogo, este trastorno generalmente está provocado por una curvatura anormal en la córnea, aunque en ocasiones también afecta al cristalino, lo que produce una visión desenfocada.
Además del astigmatismo, existen otros errores refractivos fundamentales:
- Miopía: dificultad para ver objetos que están lejos.
- Hipermetropía: dificultad para ver objetos que están cerca.
El especialista señala que el astigmatismo puede ir solo o acompañado de miopía o hipermetropía, ya que es el único error refractivo que se combina. Sin embargo, miopía e hipermetropía no son combinables porque son defectos refractivos distintos.
“Es más frecuente encontrar astigmatismo junto a miopías e hipermetropía que astigmatismo simples”, puntualiza.
¿Cómo surge?
El astigmatismo congénito es el más común, ya que en la mayoría de las ocasiones nacemos con él, por lo que suele tener un carácter hereditario.
Según el doctor Cristóbal Bescós, en la mayoría de las ocasiones nacemos con este problema visual y, aunque es cierto que a lo largo de la vida puede haber pequeños cambios, no son muy importantes.
“También puede haber otro tipo causado por enfermedades, traumatismos, accidentes…que afectan al segmento anterior del globo ocular, fundamentalmente a la córnea, pero el porcentaje es mucho más pequeño”, explica.
¿Cuáles son sus síntomas?
Entre los síntomas más comunes del astigmatismo, el experto señala:
- Mala visión, tanto de lejos como de cerca.
- Imágenes más distorsionadas.
- Deslumbramiento.
- Fatiga o cansancio ocular debido al esfuerzo visual.
Indica también que en algunos casos extremos podrían presentarse otras alteraciones, como una diploplia, es decir, una visión doble.
¿Cuándo acudir al especialista?
De cara a acudir a un especialista, el experto recomienda que en el caso de los niños y niñas cuyos padres cuentan con algún defecto refractivo y que por lo tanto, utilizan gafas, visiten el médico oftalmólogo a los tres años o incluso antes.
“Es necesario realizar una exploración con gotas, porque hay defectos que pueden pasar desapercibidos sin esta prueba. Debemos intentar evitar la ambliopía, vulgarmente conocida como ojo vago“, aclara el doctor.
Para las personas que ya llevan gafas, recomienda que acudan a revisiones anuales para llevar un control y seguimiento.
“Hay que vigilar bien la retina para descartar que haya desprendimientos u otras enfermedades”, menciona a EFEsalud.
Diagnóstico y tratamiento del astigmatismo
Tal y como apunta el especialista, el astigmatismo es un problema de la visión que cuenta con una buena solución, ya sea quirúrgica o no.
“Todo depende del nivel de astigmatismo, ya que hay distintos grados y formas. Pero para el astigmatismo común, generalmente una buena corrección proporciona una magnífica visión”, explica.
Normalmente, el astigmatismo se suele corregir con gafas o lentes de contacto.
Para el doctor Cristóbal Bescós, la cirugía del astigmatismo es todo un reto.
“Cada cirujano debe y puede personalizar los tratamientos para cada paciente, además de elegir el momento en el que se va a realizar la operación. Es necesario individualizar cada uno de los casos”, apunta.
En la actualidad, la cirugía ha avanzado exponencialmente y “con los láseres los resultados son más exactos”, concluye.
FUENTE: EFE Salud