Momentos de tensión se vivieron este miércoles en la sucursal centro de Anses Rosario cuando un hombre de unos 30 años entró a la dependencia de Sarmiento y Rioja y ante la impaciencia por ser atendido, atentó contra la integridad física de otros beneficiarios.
Según lo que pudo averiguar CLG, el agresor ingresó sin turno pasadas las 9 al primer piso del edificio céntrico con una actitud agresiva y clamó por ser atendido por una supervisora con insistencia. El pedido atrajo la atención de la supervisora que le indicó que tenía que esperar, que iba a ser atendido.
La tensión, explicó Analía Villalba, trabajadora del edificio, iba en aumento y por eso alertaron a los policías de las fuerzas federales (son las encargadas de la seguridad ya que Anses depende del Estado Nacional) para que acudieran a la zona.
Minutos más tarde, el hombre de contextura delgada intentó ingresar a la línea de atención y al no poder se escabulló en el público, tomó por detrás a otra persona que esperaba ser atendido y le apoyó un cuchillo en su cuello; éste, al ser de mayor contextura física, se pudo desprender, aunque creció el momento de angustia en el recinto donde se encontraban 200 personas.
Allí actuó la fuerza de seguridad, que pudo reducir al hombre, sin lamentar heridos. Quedó detenido y el edificio fue evacuado, mientras que los afectados fueron atendidos por médicos que acudieron a Anses.
El episodio no pasó a mayores y la policía le tomó declaraciones a los testigos que se encontraban en el edificio público.
Analía Villalba es delegada de la Asociación del Personal de los Organismos de la Previsión Social (APOPS). Con 25 años trabajando para el organismo, alertó que aunque “se han visto situaciones de violencia, no tan contundente como esta”.
Además detalló algunos momentos de la mañana en Sarmiento y Rioja. “Esa persona no tenía turno y todavía no había sido atendida, mientras esperaba se movía por todo el primer piso de una forma extraña”, recordó.
Con respecto al entorno, Villalba decretó que la gente estaba “horrorizada y empezó a gritar”, todo potenciado ya que “la policía le apuntaba con el revolver cuando lo estaban reduciendo”.
“Encima había muchos chicos”, marcó Analía y disparó: “Esto te lleva a pensar si tuviera algún arma de fuego o si hubiera usado el cuchillo”. En este sentido, la delegada reveló que mañana habrá una asamblea para pedir más seguridad y analizar los pasos a seguir por el personal de Anses.
La mujer aseguró que “esto es un reflejo de lo que pasa socialmente afuera del edificio. El tejido social está totalmente roto”.
Villalba puntualizó que Anses es la cara del Estado y por eso la gente llega con actitudes agresivas. Esta misma semana, remarcó la trabajadora, a un compañero de ella lo agredieron, sin armas, y contó otros casos donde se violentaron entre otras cosas los monitores con los cuales trabajan.