Por Sofía Dalonse
«Todo por amor» cumplió 26 años brindando alojamiento y asistencia a personas mayores y discapacitados en situación de calle. Su fundadora, Ana Beatriz Moreira, lanzó su libro «Detrás de un escritorio» donde relata su experiencia en primera persona llevando a cabo la tarea solidaria que permitió darle forma a esta fundación que está más vigente que nunca.
Se realizó una jornada festiva en el Centro Cultural del Parque Alem donde se conmemoró el aniversario de la Fundación Todo por Amor y se llevó a cabo la presentación de la obra.
Durante el evento se les entregó un diploma a cada unos de los integrantes de la Comisión Directiva de la Fundación y del Centro de Jubilados y a las personas que a lo largo de estos años colaboraron con esta gran obra.
Participaron de la jornada alrededor de 100 personas, entre ellos, Gabriel Pereyra Subsecretario de Abordajes Integrales y Alejandro Bonifacino de la Dirección de intervenciones Emergentes de la Municipalidad de Rosario. Mirta Acosta, del Área de Centros de Jubilados de PAMI; Patricia Gauna, representante de Asociación de Cuidadores Integrales y Sabrina Gatti de talleres para personas con discapacidades diferentes.
«Representantes de empresas colaboran con la donación de productos de su elaboración. Directivos, amigos y Familia de nuestra Fundación, como también nuestra razón de ser los que viven en Hogares Todo por Amor», dijo Moreira.
Según comentó: «El libro relata la historia de como fueron los comienzos ,lo que costaba sostener el lugar sin ayuda gubernamental. Pero la sociedad siempre nos abrazo y nos ayudó. El poder presentarlo fue un sueño casi imposible, pero hoy es una hermosa realidad».
Ana tiene 74 años y mantiene intacto su espíritu solidario continuando al frente de esta institución que pretende seguir colaborando con los más necesitados: «Les brindamos mercadería, los ayudamos en asuntos particulares de cada uno, algún trámite, asesoramiento, conseguir un geriátrico…».
Al referirse a los inicios, relató: «El centro nació en 1999 a raíz de la crisis del 2000, cuando mucha gente no tenía dónde vivir. Se convirtió en un hogar para personas mayores donde se llevaban a cabo distintas actividades».
Más tarde, contó que surgió la posibilidad de poner la fundación, donde de esa manera era posible recibir a personas para que puedan vivir: «Así seguimos por 25 años, este año cumplimos 26 y se nos ocurrió, para ampliar la ayuda, volver a retomar el centro de jubilados con el objetivo de colaborar con la gente del barrio, dándoles bolsones de alimentos, ropa y asesoramiento para que puedan cubrir sus necesidades».
Y continuó: «Cuando nacimos la gente dormía en colchonetas, no teníamos camas, ollas, casi nada. Lo poco que iba llevando de mi casa era lo que había. Y con el tiempo, con la solidaridad de la gente y los medios de comunicación que lo difundieron, las donaciones empezaron a llegar de todos lados».
Ana destacó el rol de la presidente Sandra Viviana Moreira, quien asumió el compromiso de «seguir trabajando para ayudar a más personas en situación de calle reivindicando derechos vulnerados y brindando hogar y familia de corazón».
Anunció, también, que en cualquier momento van a brindar información sobre la apertura de la tercer casa «Todo por Amor», un nuevo espacio que dará hogar a más personas.
Entre los agradecimientos, mencionó a entidades que siempre está presentes: Manos Solidarias, Centro de investigaciones en Derechos de la Vejez Facultad de Derechos UNR,Taller Protegido Rosario Asociación Civil, Asociación de Cuidadores Integrales, Asociación de Miastenia Gravis Rosario. También empresas que colaboran año tras año: Paladini, Fabrica de Pastas Yuli, Cooperativa Mil Hojas, Panadería Continental, Panadería La Victoria,Distribuidora Parodi, AMR La Mutual, BAR, La Segunda.
«Agradecemos a CLG Noticias por la difusión de nuestra obra y poder así llegar a más personas.
También a servicio de transporte Rami Colectivos, a los que colaboraron con el evento, con la torta Panadería Continental, con el servicio de Catering » Relájate Vero te Cocina» y servicio de sonido e iluminación Daniel Fleitas«, agregó.
Al concluir, expresó: «Cuidemos a nuestros adultos mayores. Hay mucha sabiduría en ellos por aprender, escuchemos, nos necesitan en esta etapa de sus vidas acompañemos en este tramo con dignidad y respeto».
Y cerró: «Estoy feliz de poder continuar con la tarea. Es una obra que empezó con amor y sigue en el mismo camino. La gente que me rodea, que ayuda, los voluntarios mantenemos ese criterio. El amor primero».