Teatro

Regresa «Julia, laberinto de memorias», con Stella Matute


«Julia, laberinto de memorias», la obra escrita y dirigida por Fernando Alegre e interpretada por Stella Matute, estrenada el pasado abril y merecedora de amplios elogios de la crítica y el público, vuelve a escena en el teatro El Popular, Chile 2080, barrio de Balvanera, los domingos a las 19 a partir del 7 de agosto.

La novedad es que las funciones del mes se realizarán con debate posterior a cargo de especialistas en las temáticas abordadas en la obra: violencias a las infancias, abuso sexual, violencia de género y construcción de la Identidad.

Ellos y ellas son Emiliano Samar (07/08), actor, director de teatro, supervisor docente, docente universitario, escritor e investigador en materia de diversidad sexual, géneros y educación; Sandra De Luca (15/08), licenciada en psicología especialista en niños y niñas, maltrato infantil y traumas; Diego Ortiz (22/08), abogado, profesor universitario en Ciencias Jurídicas, especialista en violencia familiar, e Irene Intebi (29/08), psiquiatra infantojuvenil, escritora especializada y psicóloga en protección infantil en la Argentina, países de América latina y España.

La historia que se estren en abril tiene como protagonista a JuliJulia

La historia que se estrenó en abril tiene como protagonista a Juli/Julia.

Según apuntes de Télam en su momento, “el personaje es una niña, pero puede ser un niño o un sujeto sin género; de hecho utiliza el lenguaje inclusivo y para más datos en algún momento surge de un arcón una serie de cintas multicolores, como las utilizadas por las diversidades; es y no es, juega a ser niña aunque su físico sea el de una persona mayor, pero la actriz lo empequeñece, lo lleva al pasado, recurre a ese laberinto de memorias donde deben estar las claves».

“Pocas veces se ha visto unipersonales tan magnéticos, tan llamativos, tan amorosos como el que Matute construye sobre el escenario: la platea está convencida de hallarse frente a una niña que aprende el lenguaje, que aprende a leer con típicas letras de cartón, que se reencuentra con los muñecos y muñecas del pasado, en un ejercicio que no derrama demagogia.”