La primera Luna llena posterior al equinoccio invernal – el momento el año en que el día y la noche tienen la misma duración porque el Sol está sobre el Ecuador – denominada también «Superluna» o «Luna de Gusano», está apareciendo en el cielo con mayor brillo y tamaño de lo habitual.
Según la agencia espacial estadounidense, NASA, este año la luna «aparecerá en fase llena durante unos tres días alrededor de las 14:48 EDT, desde la madrugada del sábado 7 de marzo, hasta la madrugada del martes 30».
«La primera Luna llena posterior al equinoccio invernal carga con un profundo significado para distintas culturas alrededor del mundo. Esta luna marca el inicio de la pascua para el judaísmo y el cristianismo, y se relaciona con otras festividades que celebran el final del invierno en el hemisferio norte y el aumento de la temperatura y la luz solar que la primavera trae consigo» informó por su parte el sitio en español de National Geographic.
«A diferencia de las primeras lunas de 2021, este plenilunio será uno de los más cercanos a nuestro planeta de todo el año, de modo que durante las noches del 28, 29 y 30 de marzo, podrá observarse ligeramente más grande que el promedio», a simple vista y sin necesidad de instrumentos o lentes especiales, agrega.
«La superluna es un fenómeno que ocurre cuando coinciden dos cosas: la luna en el perigeo, en decir, en la posición más cercana a la Tierra; y la luna llena», explicó oportunamente a Télam Andrea Buccini, astrofísica del Instituto de Astronomía y Física del Espacio (IAFE).
«La luna orbita alrededor de la Tierra, hay momentos que se acerca más y por momentos está más alejada; pero además ocurren las fases de la luna, que tiene que ver con cómo es iluminada por el sol y que tiene que ver con la posiciones relativa de la luna, la Tierra y el sol. Las superlunas son relevantes por la coincidencia de dos fenómenos», agregó.
Buccini también consideró que este tipo de fenómenos son importantes para la investigación en tanto atañen al «movimiento de los cuerpos celestes» y permiten «chequear modelos orbitales o las predicciones de movimientos» de estos astros.
Los efectos en la salud humana
Estudios de la relación entre la fase de luna llena y los cambios de temperamento cíclico en pacientes bipolares han encontrado que muchos cambios de humor se corresponden con los ciclos de la luna. Es más: estos ciclos de manía y depresión que sufren los pacientes bipolares se interrumpen cuando llega la super luna, para volver a regularizarse en la siguiente fase.
También, se conoce otra investigación donde se concluye en que la luna llena influye en el tiempo que tardamos en dormirnos, acelerándolo. Los campos magnéticos que interactúan ( el de la Luna y el de la Tierra) serían la clave de este fenómeno, por lo que en superluna podemos notar que nuestro sueño se modifica.
Durante siglos la gente creía que la Luna afectaba el comportamiento humano. De hecho, la palabra «lunático» (persona que padece locura por intervalos) proviene del latín «lunaticus», que significa «lunar». Tanto el filósofo griego Aristóteles como el naturalista romano Plinio el Viejo creían que la locura y la epilepsia eran causadas por el satélite natural de la Tierra.
Se suele decir que la fase de Luna llena acelera el parto, pero no hay evidencia científica de ello. Lo mismo ocurre con la evidencia de que el ciclo lunar aumenta la violencia entre los pacientes psiquiátricos o los reclusos, aunque un estudio reciente sugirió que la actividad delictiva al aire libre (incidentes que ocurren en las calles o en entornos naturales como las playas) puede ser mayor cuando hay más luz de la Luna.
Fuente: Pronto