Por Gina Verona Muzzio
Descubrir el ciclo de cada cuerpo, prestar atención a la alimentación, al sueño, a la respiración, a cada etapa del ciclo menstrual y de la vida, autoconocerse interna y externamente son algunos de los principales preceptos de la ginecología natural. Como toda medicina que tenga su anclaje en la naturaleza, se remonta a saberes ancestrales y a su recuperación o puesta en valor.
Hay varias miradas respecto a la ginecología natural, por lo que la Dra. Mariana Okon, quien se vuelca hacia esta disciplina, explicó a EQC Mujer: “La mía tiene que ver con entender que los ciclos femeninos, menstruales y las etapas de la vida, son procesos naturales que han sido excesivamente medicalizados y que es muy importante el autoconocimiento para entender cada uno de ellos y saber qué es lo mejor para nosotras. Cada mujer es única”.
De un tiempo a esta parte, gran parte de la sociedad ha comenzado a tomar consciencia sobre algunos temas clave en el cuidado de la naturaleza y de su cuerpo como parte de ella. Hay a veces también algunas cuestiones relacionadas a la medicina natural que se ponen de moda, “pero los pueblos ancestrales lo vienen teniendo desde siempre”, recordó Okon.
Y añadió: “Con este tema de que la mujer es la encargada de la reproducción y el cuidado familiar y de la tierra, de alguna manera su salud y su ciclo tienen que ver con esto, con los ciclos de la luna, los ciclos del crecimiento de las plantas. De algún modo, pensar en lo femenino es pensar en naturaleza también. Porque la naturaleza cicla como nosotras”.
Sin embargo, la ginecóloga rosarina expresó que durante mucho tiempo se fueron medicalizando “procesos que son naturales y normales”. Y ejemplificó: “Pensar en internar una mujer porque va a parir, cuando eso no es una enfermedad que necesita una internación. O pensar la menopausia como una enfermedad. De alguna manera, ha habido una desviación y se ha hecho difícil diferenciar lo que es natural de lo que es una enfermedad con respecto a la ginecología”.
Consultada sobre cuáles pueden ser, a su entender, algunas de las razones del retorno o la recuperación de estos saberes y tratamientos naturales para la ginecología, Okon consideró que tiene que ver con un proceso. “El tema empezó quizás con las mujeres que empezamos a buscar ginecólogas mujeres. Hoy, prácticamente es una especialidad que no tiene varones y, en otro momento, todos eran varones. Me parece que tiene que ver con estar con alguien que entendiera más el proceso de lo que me está pasando a mí como mujer”, analizó.
“Por un lado eso, por otro el respeto, porque es una especialidad que tiene mucho que ver con la intimidad, con lo sexual, con lo personal. En ese sentido, esta cuestión de sentirse más comprendida fue llevando un poco ese proceso. En general está pasando eso con la medicina, que ya no es el médico el que dice lo que hay que hacer, sino que se da información y la persona decide qué es lo mejor para ella”, agregó.
Otra cuestión clave es el pasaje de los protocolos y que todas las personas que tienen el mismo padecimiento se traten más o menos igual, a comprender que “cada persona es distinta y necesita cosas diferentes”.
El ciclo y los dolores
Es común para muchas personas menstruantes sentir dolores al momento de la menstruación o en los días previos. La Dra. Okon explicó que “el dolor menstrual habla de que nuestro cuerpo está avisando que hay algo que estamos haciendo de una manera que no nos permite adaptarnos”.
En este sentido, desmitificó un poco el tema del período menstrual y el mal humor u otro tipo de afectaciones: “Hay una especie de prejuicio de que somos cíclicas, ciclotímicas, que cambiamos de humor. En realidad esto no es así, es poder explorar estas distintas posibilidades que tenemos en cada momento de nuestro ciclo. Eso también implica pensar que en el momento en que estamos menstruando no es cualquier momento. Solemos hacer nuestra actividad cotidiana como si estuviéramos igual que siempre y eso es una de las cuestiones que genera más dolor”.
Por eso, la profesional indicó que “planificar la vida cotidiana de acuerdo al momento en que vamos a menstruar es muy importante para este tema de los dolores”. También “hay cuestiones que tienen que ver con la alimentación, muchas veces el comer apurada, ansiosa, comer comida rápida o con muchos aditivos o con los mismos agrotóxicos por ahí genera cuestiones en relación a los dolores menstruales. Tendría que ver primero con pensar una cuestión natural respecto a nuestras funciones vitales: comer, dormir, respirar. Es muy importante para que el ciclo menstrual no sea doloroso”.
Por otra parte, Okon mencionó que existen técnicas respiratorias que se usan para disminuir los dolores y muchas plantas que son antiinflamatorias, como por ejemplo la manzanilla. “Pero cada mujer se beneficia con algo diferente y nada es mágico si primero no se modifican estos otros aspectos”, aclaró.
Información y autoconocimiento
Hoy en día, con las redes e internet es fácil acceder a información sobre cualquier tema que interese. Sin embargo, al tratarse de medicina natural, es importante consultar con profesionales y “fundamentalmente, con poder vivirlo”. “No es lo mismo una toallita higiénica que tiene un montón de cosas artificiales, que una toallita natural o la copa menstrual. Cuando empezamos a probar en nuestro propio cuerpo estas cosas más saludables, nos vamos sintiendo mejor. Por este lado tiene que ser esta cuestión”, destacó la Dra. Okon.
“La medicina natural es una tendencia que va en aumento. Sobre todo, me parece interesante que la mayoría de los profesionales tienen respeto hacia estas posiciones. Si una mujer plantea que no quiere tomar una medicación, que quiere algo más natural o comenta que está haciendo alguna práctica natural respecto a su padecimiento ginecológico hay un respeto que en otras épocas no había. Creo que es una tendencia que se va a ir afianzando con el tiempo”, auguró.
Finalmente, a modo de sugerencia para todas las mujeres, Okon recordó que “es muy importante el conocimiento del propio cuerpo. Nosotras a veces no sabemos ni siquiera cómo son nuestros genitales internos. Ahora en la escuela se está enseñando un poco más, se está hablando más de este tema. Pero me parece importante conocernos, saber dónde están los ovarios, para qué sirven, qué significa la ovulación, conocer nuestras vulvas, revisarnos nuestros pechos. Me parece que es lo más importante para transitar por un camino de buena salud ginecológica y general”.