Un artículo del sitio especializado mejorconsalud.com explica las causas de las infecciones bacterianas y propone alternativas para poder tratarla naturalmente, detallando las particularidades de ocho elementos que se pueden consumir y son efectivos para mejorar las condiciones de salud.
Las infecciones bacterianas se desarrollan cuando en el interior del cuerpo se reproducen algunas bacterias nocivas debido a un debilitamiento del sistema inmunitario. Estas suelen tener diferentes niveles de gravedad y, de hecho, muchas pueden ser letales si no se les brinda un tratamiento oportuno.
La mayoría de los casos pueden controlarse con la administración y consumo de varios antibióticos farmacológicos que, en poco tiempo, frenan y destruyen el crecimiento bacteriano. No obstante, su ingesta excesiva está desaconsejada y, de hecho, está relacionada con algunos efectos secundarios, tanto inmediatos como a largo plazo.
Por fortuna, hay muchos ingredientes de origen natural cuya composición ayuda a reducir la infección en casos leves, sin necesidad de recurrir a productos químicos. Si bien queremos dejar claro que no remplazan los medicamentos, son una buena alternativa para afecciones leves o casos puntuales.
1. Miel
Considerada como el mejor antibiótico natural, la miel de abejas pura es uno de los mejores remedios naturales contra las infecciones bacterianas. Es muy útil cuando se ingiere como remedio natural, pero también aporta maravillosos beneficios con su aplicación tópica en heridas o quemaduras superficiales.
Sus compuestos activos, incluyendo sus azúcares naturales, facilitan el control del crecimiento de las bacterias. A su vez, mejoran el tratamiento de las úlceras, los problemas digestivos y las infecciones urinarias. Dado que contiene vitaminas, minerales y sustancias antioxidantes, es un buen complemento alimentario para fortalecer el sistema inmunitario (White, 1979).
2. Cebollas
La cebolla cruda es un alimento beneficioso para aquellos que tienen una infección bacteriana. Rica en compuestos sulfurosos como la alicina, son útiles para aliviar las afecciones que afectan el sistema respiratorio y urinario.
Su ingesta disminuye la presencia de bacterias. Por si fuera poco, sirve para nutrir la flora bacteriana que mantiene las defensas activas. Además, actúa como un antiinflamatorio natural para mejorar la circulación y reducir el dolor.
3. Aloe vera
Valorada desde la antigüedad por sus propiedades hidratantes, antiinflamatorias y antibacterianas, la planta de aloe vera es una gran solución contra algunos tipos de infecciones leves. Su jugo natural disminuye las bacterianas dañinas en los intestinos. También, favorece el tratamiento de las enfermedades del tracto urinario y la vagina. Además, es uno de los mejores productos para proteger la piel y acelerar su proceso de recuperación ante pequeñas heridas.
4. Probióticos
Los alimentos probióticos son aquellos que al ingerirse reducen la presencia de bacterianas dañinas y aumentan la proliferación de microorganismos protectores en la flora intestinal. El yogur natural, las coles fermentadas y otros probióticos naturales son útiles para aliviar los síntomas de las infecciones vaginales, respiratorias y estomacales. Incluso, consumidos de forma regular, aumentan la respuesta inmunitaria del cuerpo y previenen las enfermedades urinarias y de la piel.
5. Cúrcuma
La cúrcuma es una especia con propiedades analgésicas, antibióticas y antiinflamatorias. Se ha utilizado desde la antigüedad como remedio contra infecciones. Su compuesto activo, la curcumina, no solo le brinda su color característico sino que le confiere una amplia variedad de propiedades para la salud. Esta facilita el tratamiento de las infecciones bacterianas, incluyendo las que afectan la zona íntima y el tracto urinario.
6. Vinagre de sidra de manzana
La principal razón por la que el vinagre de sidra de manzana ayuda a controlar las infecciones bacterianas es porque ayuda a regular el pH natural de la sangre. De esta manera, ayuda a mejorar la respuesta inmunitaria del organismo. Sus ácidos naturales actúan como alcalinos, disminuyendo el exceso de acidez y los compuestos que mantienen un ambiente adecuado para el crecimiento de las bacterias. Promueve la desintoxicación del cuerpo y actúa como un antiinflamatorio natural sobre los tejidos afectados por la infección.
7. Jugo de arándanos
El jugo natural de arándanos no solo es delicioso, sino que tiene interesantes efectos en la salud de todo el cuerpo. Además de facilitar la pérdida de peso, es un excelente agente antibacteriano. Por lo que facilita el control de afecciones urinarias y vaginales. Tiene efectos depurativos y diuréticos que mantienen limpia la sangre.
8. Aceite esencial de árbol de té
El aceite esencial de árbol de té es un buen remedio para las infecciones bacterianas en la piel y la vagina. Este contiene sustancias activas que combaten de forma directa las bacterias, frenando su crecimiento y destruyendo las existentes. No obstante, dado que puede ser un poco agresivo, debe usarse de forma moderada, preferiblemente diluido en agua.