El presidente estadounidense, Donald Trump, aterrizó en Florida para una polémica visita luego de que el estado sureño registrara hoy su segundo mayor incremento diario de casos de coronavirus, más de 11.000, y de que el país se anotara ayer un nuevo récord de 60.646 contagios en un solo día, en medio del mayor repunte nacional de la enfermedad en dos meses.
La visita de Trump a Florida desató críticas no solo por comprometer los escasos recursos sanitarios de un estado que se convirtió en nuevo epicentro del coronavirus en Estados Unidos, sino por el hecho de que no será para hablar de la crisis sino para participar de eventos relativos a la campaña para los comicios de noviembre, en las que busca su reelección.
Su rival demócrata en los comicios, el ex vicepresidente Joe Biden, dijo que la visita de Trump a Florida era «para la foto» y para desviar la atención de su fracaso en el manejo del coronavirus
Poco antes de la llegada del mandatario, autoridades sanitarias de Florida reportaron hoy 11.433 nuevos casos de coronavirus en el estado y 93 muertes por la enfermedad, el segundo mayor número de contagios diarios después de los 11.458 informados el 4 de julio pasado.
El recrudecimiento del coronavirus en Estados Unidos, que esta semana se convirtió en el único país con más de 3 millones de casos, es una pésima noticia para las aspiraciones de reelección del republicano Trump, que es muy criticado por su gestión de la crisis, su subestimación de la gravedad de una enfermedad y su premura en reabrir la economía.
El país, el más afectado del mundo por la pandemia, con más de 133.000 muertes, registró ayer un récord de 60.646 casos de coronavirus, superando el de 60.021 del 7 de julio pasado, según la base de datos de la Universidad Johns Hopkins.
La primera parada del mandatario en Florida será en la localidad de Doral, ubicada en el condado de Miami-Dade, donde los casos de Covid-19 se dispararon en las últimas semanas y dejaron al sistema sanitario al borde del colapso.
Luego irá a la sede del Comando Sur de Estados Unidos, donde participará de una reunión sobre tráfico de drogas en América Latina, y más tarde asistirá a una mesa redonda en apoyo a inmigrantes venezolanos, dos temas que le suman muchos votos entre su base de apoyo en Florida, uno estado muy importante en todas las elecciones presidenciales en Estados Unidos.
Después se desplazará a Hillsboro Beach, al norte de Miami, para participar de un evento privado de recaudación de fondos para su campaña, informó CNN.
La visita de Trump en clave electoral fue criticada por algunos medios, dada la situación de emergencia sanitaria por coronavirus que está atravesando Florida y, particularmente, el condado de Miami-Dade, donde estará el presidente.
«Con más de 233.000 casos en el estado y más de 4.000 muertes, está claro que la respuesta de Trump -ignorar, acusar a otros y distraer- se ha llevado a cabo a expensas de las familias de Florida», dijo Biden en un comunicado.
Más de 20 de los 50 estados del país tuvieron que frenar sus reaperturas o dar marcha atrás con ellas para contener el repunte del coronavirus.
Además de Florida, Arizona, Texas y California son los más afectados, aunque los casos han subido en casi todos los 50 estados.
Anoche, el gobernador de Arizona, el republicano Doug Ducey, ordenó a los restaurantes del estado a reducir a la mitad el número de clientes que reciben, pero no llegó a decretar sus cierre para contener el brote.
También anoche, la gobernadora de otro estado sureño, Nuevo México, Michelle Lujan Grisham, anunció la suspensión del servicio en el interior de restaurantes, el cierre de los parques estatales para no residentes y la prohibición de los deportes de contacto en colegios.