El próximo 3 de mayo se realizarán las elecciones generales en Bolivia. Ante esto, el enviado personal del Secretario General de las Naciones Unidas indicó que el proceso electoral debe conducirse “con pleno respeto de los derechos políticos y las libertades fundamentales”.
Jean Arnault consideró que a partir de este momento comienza una etapa crucial del proceso electoral y de consolidación de la paz en el país sudamericano. “Para que esto se realice con éxito, ciudadanos y ciudadanas, candidatos y candidatas, independientemente de su afiliación política, deberán poder ejercer sus derechos constitucionales y a elegir y ser elegidos con plena libertad, sin atropellos, intimidación o discriminación de ningún tipo. La legitimidad del proceso electoral dependerá de ello”.
Arnault recordó que el actual clima político que se respira el país, donde observó “una exacerbada polarización y sentimientos encontrados de esperanza, pero también de incertidumbre, inquietud y resentimiento”, especialmente tras la grave crisis política y social vivida durante el año pasado, supone un importante desafío conducir este proceso electoral “con pleno respeto de los derechos políticos y libertades fundamentales”.
Pero conseguirlo dependerá de que tanto las autoridades, como las instituciones, los candidatos, los partidos y alianzas políticas de todas las tendencias, los movimientos sociales y cívicos, los medios de comunicación y la ciudadanía “estén a la altura de la situación”.
«Es imprescindible que surja un llamado unánime a debatir pacífica y democráticamente y a desistir de toda acción que viole el derecho a la libertad de reunión pacífica, de expresión, de asociación, de opinión y de circulación», aseguró.
Proscribir la incitación al odio y la violencia
Añadió que “corresponde en particular proscribir los discursos de incitación al odio y a la violencia directa o indirecta o a la discriminación. Si bien, en medio de las tensiones actuales, esos discursos buscan objetivos partidistas de corto plazo, perjudicarán a más largo plazo la paz, la tranquilidad y la gobernabilidad democrática del país”.
Según informaciones de prensa, cuatro alianzas y cuatro partidos políticos se inscribieron en el Tribunal Supremo Electoral para participar en los comicios del próximo 3 de mayo. El ex presidente del país, Evo Morales, forma parte de la lista del partido Movimiento al Socialismo como candidato al Senado.
Objetivo: eludir la polarización
Al mismo tiempo, el Secretario General de las Naciones Unidas explicó este martes que su enviado ha trabajado activamente con un único objetivo: impedir la polarización en el país andino y generar las bases necesarias para la celebración de unas elecciones normales.
Durante una conferencia de prensa con los medios de comunicación acreditados ante la Organización, António Guterres manifestó que “nuestro enviado especial ha trabajado muy activamente con un solo objetivo: evitar o ayudar a evitar que Bolivia se polarice y entre en un conflicto que sería terrible para el pueblo y para el futuro del país, y crear las condiciones para el restablecimiento de un proceso democrático normal, con elecciones normales en el país y evitando una confrontación que sería un desastre”.
Por último, Arnault estableció una serie de puntos donde explicó cuál será el rol de las Naciones Unidas ante el proceso electoral:
- Proporcionará asistencia técnica al Tribunal Supremo Electoral y los Tribunales Electorales Departamentales para que el Órgano Electoral Plurinacional cumpla sus funciones ejecutivas y jurisdiccionales de acuerdo con las altas expectativas que la ciudadanía ha depositado en los nuevos gestores y gestoras del proceso electoral.
- Efectuará un monitoreo proactivo del respeto a los derechos humanos en conforme a los estándares internacionales, particularmente con relación al ejercicio de los derechos políticos de todas y todos los participantes en el proceso electoral, aparte de su ideología y su afiliación política. También prestará especial atención al respeto y garantías del debido proceso. En un contexto electoral es esencial que no se realicen actos de persecución política, incluyendo el abuso de procedimientos judiciales.
- Actuará en la identificación, alerta temprana, monitoreo y seguimiento específico de denuncias de acoso político y electoral o violencia contra las mujeres.
- En coordinación con las instituciones y la sociedad civil, ofrecerá su acompañamiento a los esfuerzos de resolución de conflictos que pudieran llevar a un resurgimiento de la violencia y comprometer así la integridad del proceso electoral. En este sentido, seguirá apoyando la facilitación liderada por la Conferencia Episcopal de Bolivia. Asimismo, acompañara las iniciativas de diálogos para la pacificación y el desarrollo democrático del país.