Siete de los diez rugbiers detenidos en Villa Gesell por el crimen de Fernando Báez Sosa, que fue asesinado a golpes a la salida del boliche Le Brique luego de ser atacado en manada, fueron reconocidos por testigos en la segunda rueda de reconocimiento. Los señalaron como las personas que participaron de la golpiza tanto en el interior del boliche Le Brique como a la salida del mismo.
Varios de los reconocimientos fueron realizados de manera fotográfica, ya que algunos de los imputados perdieron el bronceado después de pasar seis días encerrados en un calabozo, lo que complicaba la conformación de las rondas, según publicó TN.
Fue reconocido por dos de los tres testigos uno de los principales sospechosos, Máximo Thomsen: lo señalan como una de las personas que le pegó a Fernando en la calle, frente al boliche. El joven de 20 años es el más comprometido en la investigación.
En el caso de Ciro Pertossi, de 19 años, también fue reconocido por uno de los testigos que lo ubicó como atacante de uno de los amigos de Fernando. Fue quien, en la semana, había dicho que ellos salieron “a divertirse” y que “la vida” les jugó “una mala pasada”.
Según las pesquisas, otro de los identificados de manera fotográfica fue Enzo Comelli, también de 19. Un testigo lo reconoció como uno de los integrantes del grupo dentro del boliche Le Brique. Ya el jueves, en la primera tanda de reconocimientos, dos testigos lo habían señalado como uno de los que inició el ataque en la calle.
También fue reconocido Matías Benicelli, de 20 años, a quien un testigo acusó de arengar la agresión a Fernando mientras estaba indefenso, dijeron a Télam al menos dos fuentes que estuvieron presentes en la rueda de presos. Fuentes judiciales informaron que los nuevos tres imputados reconocidos son Ayrton Viollaz, de 20 años, Luciano Pertossi, de 18, y Lucas Pertossi, de 20.